Columnistas
La planta que promete

Iniciaron las sesiones en el Congreso, con la novedad de un polémico proyecto de ley que busca legalizar la dosis recreativa del cannabis para mayores de 18 años.
Un grupo de 50 congresistas liderados por el senador Gustavo Bolívar del Partido Decentes, junto a la representante a la Cámara por el partido Alianza Verde, Khaterine Miranda debatirán frente al Polo Democrático y el Partido Conservador quienes no avalan este proyecto.
¿Será esta la solución para acabar con el narcotráfico? Si tenemos en cuenta que en Colorado, uno de los primeros condados donde aprobaron esta Ley, los defensores de la legalización vendieron la idea de ser un gran negocio para la economía local debido a la bonanza que se obtendría del pago de impuestos de los negocios que la comercializaran. Pero no sucedió así: al ser legales, estos negocios deben pagar impuestos, por lo tanto el producto debe venderse con un valor más alto al precio que ofrece el mercado ilegal en donde su valor es inferior.
Ubicándome en Colombia, mi inquietud como joven es: ¿está preparado el país para dar éste paso, teniendo en cuenta que vivimos un conflicto armado de más de medio siglo en donde el narcotráfico es el principal proveedor de dinero para mantener esta guerra?
Aquí viene mi juicio de valor: en un país tan corrupto como el nuestro, ¿se puede garantizar que sólo se les venderá a los mayores de edad acabándose el consumo infantil?
¿Estamos siendo realistas con la legalización? ¿Se acabarán los carteles, el desplazamiento de personas, desaparecerá el mercado ilegal y todo lo que él conlleva? Hablo de la influencia en niños y jóvenes para el consumo, delincuencia juvenil y prostitución infantil, sin mencionar otros iguales o peores a esta realidad.
¿Terminará la legalización del cannabis el hacinamiento en nuestras cárceles? En Colombia 23.242 detenidos están imputados por narcotráfico según informe de La FM del pasado 26 de junio, en donde señala el ranquin de los delitos más frecuentes por los cuales ingresan los colombianos a la cárcel.
Si la legalización garantizara que el consumo va a disminuir, los delitos por narcotráfico van a desaparecer, las familias se van a fortalecer, la misma naturaleza se va a ver beneficiada porque disminuiría la tala de árboles para la formación de nuevas plantaciones, o nuestros campesinos harán parte de esta nueva empresa plantando de manera legal el cannabis, sería fabuloso. Pero creo que se trata tan solo de otro espejismo.
Pienso más bien que estamos realizando una salida en falso en la carrera por llegar a la legalización de la mariguana en donde sólo pesa la productividad empresarial del cultivo de la mata. Utilizando el ardid del “bienestar de los consumidores”, sin tomar en cuenta que no se encuentran en posibilidades reales para tomar buenas decisiones.
Ruego porque no sea un proyecto que sólo beneficie a grandes empresarios que ven las ganancias que deja la legalización como otro de sus beneficios astronómicos, y los únicos privilegiados que lograrían aprovechar este gran negocio. Serían Los millonarios de siempre constituyendo otro monopolio más.
*Girardoteño, estudiante de noveno año de secundaria.
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