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Siete documentos y $11 000 millones despilfarrados en Girardot

Además de lo inoportuno en el tiempo al haber despilfarrado $10 000 u $11 000 millones para justificar una obra como la del Parque Lineal del Sol, con evidentes errores históricos sobre Girardot, no hay certeza de los permisos del Instituto Nacional de Vías (Invías) y el Ministerio de las Culturas, el Arte y los Saberes para su ejecución.
Se ha conocido a través de las redes sociales la respuesta del Invías a un derecho de petición del veedor Sergio Santos Mosquera, en el que confirman «[…] que la distancia no podrá ser en ningún caso menor a los doce (12) metros, siendo esa distancia la considerada como segura en los términos ajustados a la normatividad vigente». Refiriéndose el Instituto a la distancia de ocupación de la línea férrea de acuerdo con en el Código Nacional de Tránsito.
La distancia autorizada para poder construir el Parque Lineal del Sol, adyacente a la línea férrea, y el permiso por parte de Mincultura para intervenir un Bien de Interés Cultural (BIC) del ámbito nacional, como lo son el conjunto de las estaciones del ferrocarril de Colombia, fue siempre una de nuestras reiteradas preguntas al secretario de Infraestructura, arquitecto Pedro Felipe Saavedra. El Decreto 746 de 1996 en su Artículo 2 dice: «[…] todas las restauraciones, refacciones, remodelaciones y las obras de protección, defensa y conservación que deban efectuarse en todas las Estaciones del Ferrocarril existentes en el país, deberán contar con el permiso previo del Consejo de Monumentos Nacionales».
Hay que recordar que, según inventario de los BIC del ámbito nacional del 29 de diciembre de 2023, el corredor Férreo Facatativá-Girardot, «[…] el Puente sobre el río Magdalena, incluido, del municipio de Girardot […]», es uno de ellos. (Resolución 800 del 31 de julio de 1998).
Otro segundo BIC de la misma característica es la Estación del Ferrocarril Girardot (Línea Facatativá Girardot, Kilómetro 172), según Decreto 746 del 24 de abril de 1996.
Preguntar por los permisos significó recibir respuestas cortas y evasivas, en donde no se hablaba de Mincultura; y en cuanto a la distancia entre rieles y obra, 70 centímetros fue la lacónica respuesta siempre. Pues bien, vuelve a aparecer la duda de si la obra cuenta con todas las autorizaciones, incluida la del Ministerio de las Culturas.
Entrevisté el sábado pasado (27.01.2024) a un alto exfuncionario de la Administración Municipal, que conoce al detalle la información, quien por razones que respetamos solicitó que omitiéramos su nombre.
Asegura que durante el proceso que adelantó la Oficina de Infraestructura, desde cuando recibió la documentación por parte de Planeación, se originaron siete documentos.
El primer documento es el de la Oficina de Planeación, cuando «[…] dan la licencia y nos dicen que tramitemos el permiso de intervención de obras en el Invías».
Nuestra fuente calcula que en agosto del 2023 los visitó el gerente general de la sucursal de Invias, Cundinamarca, con quien se inició el permiso de intervención para empezar la obra. De la visita realizada al lugar del proyecto, resulta el segundo documento.
Afirma el exfuncionario que «En ese momento ya ellos nos autorizan para que nosotros arranquemos obra […]».
El tercer documento es la certificación escrita de Invías autorizando el inicio de la obra, en la cual confirman «[…] que son ellos los únicos responsables de esos corredores viales, con base en un convenio que se firma entre la Gobernación de Cundinamarca, el Ministerio de Cultura y el Invías, y le entregan la potestad de esos corredores viales, tanto el de Zipaquirá como el de Faca y Girardot, al Invías».
El cuarto documento, en las palabras de nuestra fuente, es «[…] el convenio tripartito que es del 2009». Con todo esto, dice, «[…] nos sentimos como más tranquilos» al tener los permisos pertinentes.
Luego se realiza una reunión en el Instituto de Concesiones de Cundinamarca (ICCU), debido a una queja que manifiesta que «el parque lineal no tiene ningún permiso». Entendiendo que fue en el ICCU en donde la Oficina de Planeación radicó el proyecto, siendo este el que lo viabiliza y entregó los recursos. Se citó a una segunda reunión en la que un representante del Instituto de Cultura de Cundinamarca (IDECUT) sugirió que se solicitara permiso a Mincultura; previendo que de pronto el convenio tripartito se encontrara sin vigencia. Se origina un acta, que es el quinto documento.
En esa misma reunión un delegado del IDECUT sugiere que la Alcaldía de Girardot eleve una consulta, «[…] para que sea el INVIAS ya del orden nacional, que nos digan si evidentemente ellos están autorizados para dar ese permiso o no». De aquí resulta el sexto documento, con firma digital del director del Invías, asegurando el exfuncionario que, «[…] ahí vuelven y dicen que el proyecto es completamente viable y que el proyecto de Girardot no tiene ningún problema para ser desarrollado».
La Administración municipal, entonces, acatando la sugerencia del delegado del IDECUT, radicó el proyecto ante Mincultura. Dice la fuente que finalizando noviembre llegó un correo electrónico, que «[…] sería el séptimo documento […] y que dice, por favor subsanen los siguientes requerimientos».
Estos requerimientos se referían a la escala utilizada en la presentación del mismo, entre otros, que asegura, llegaron a la Oficina de Planeación. Por esa misma época el IDECUT también remitió un oficio a Planeación solicitando información sobre el trámite surtido ante Mincultura.
El exfuncionario considera que por parte de Planeación algunas situaciones fueron subsanadas, pero otras no. En cuanto al concepto de Mincultura dice que, «[…] el Ministerio nunca nos dijo no, el Ministerio nos dijo, okey, tienen que traerme estas subsanaciones, que son las que le hablo (sic)».
En resumen: hay tres documentos del Invías, el acta de visita, la viabilidad, y el tercer documento que lo firma el responsable de la Dirección Marítima, Fluvial y Férrea del Invías. Agrega sobre este último que «Es un documento de dos páginas donde dice que el proyecto es viable, que lo ve bien, que cualquier entidad del orden nacional debe contemplarlo para que le dé los trámites, y que es objeto para realizar, es un documento muy serio», asegura.
Sobre el tema de los setenta centímetros o los doce metros, dice no recordar mucho. Es ahí en donde está el punto de quiebre de esta mega obra que debía estar instalada a finales del año pasado, pero como van las cosas, se secará dos veces el Magdalena, y nada de nada.
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