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Girardot turística: a quien le interese

Asegurando el hecho de que a las buenas o a las malas Girardot sea catalogada como una ciudad turística, a la mayoría de los eventos organizados por la administración municipal o por el Instituto Municipal de Turismo, Cultura y Fomento (IMTCF) se les ha bautizado hereditariamente con el apellido «Turístico», o similares.
Si la sola palabra hiciera milagros logrando lo que ningún alcalde de elección popular ha alcanzado, o sea, encaramar a la casi ciudad en los pedestales privilegiados de los municipios turísticos más destacados de Colombia, de Cundinamarca, o al menos de la región del Alto Magdalena, el presente de esta provincia sería más próspero, más prometedor, más atractivo y menos, mucho menos decadente.
Era el Día de las Brujas de 2024 cuando descubrí accidentalmente en la página de la Gobernación de Cundinamarca una guía turística del Departamento, en la que entre otras atracciones invita a conocer los «imperdibles». Es posible que Girardot se encuentre entre los municipios no imperdibles sino perdidos, porque desde hace ya un tiempo su ostracismo es su común denominador.
Afanosamente esculqué entre los 116 municipios del Departamento para encontrar cómo y qué se ofrecía de la exciudad de las Acacias; porque hasta eso hoy es historia.
La guía está dividida en cuatro grandes sectores: Destinos imperdibles; Productos turísticos; Descubre los 116 municipios, y el Calendario de ferias y fiestas.
En los imperdibles, de 27 destinos turísticos ninguno hace referencia a la casi ciudad. En la sección de los Productos Turísticos, ni en turismo de naturaleza ni en el cultural aparecemos.
Avanzando, me encuentro con el Calendario de Eventos de Cundinamarca del 2023, con algunas inexactitudes: Girardot aparece en enero con la Carrera Atlética Internacional Ciudad de Girardot, que si las fuentes consultadas no se equivocan, no se realiza desde marzo de 2019 bajo la dirección del director de Deportes de ese entonces, Harold Yair Benavides Ortiz; para agosto aparece la Muestra Folclórica Llanera, que no tiene nada que ver con lo que originalmente se conoció como el Encuentro Nacional de Música y Danza Llanera, que según me informó su creador no se realiza desde el 2010.
Subrayo, las actividades culturales programadas para ese año y que efectivamente se realizaron fueron: la Muestra Folclórica de Música y Danza Andina, y la Muestra Folclórica Llanera, que, aunque diferente al Encuentro Nacional de Música y Danza Llanera, se realizó con la presencia de un grupo musical. Hago la corrección porque en Wam Noticias fui inexacto por una confusión con la información suministrada por mi fuente.
Pero, a decir verdad, lo que más me sorprendió de la Guía Turística fue cuando me encontré con las festividades de la casi ciudad: el Festival de Danzas por Parejas, en el mes de marzo; el Festival de Raigambres y Tradiciones Campesinas en septiembre; Ferias y Fiestas en noviembre. Y en gastronomía (que se deduce es lo típico, lo que más se consume), aparece como por arte de magia el cordero asado o sudado, las criadillas, las fresas, el mejor pan, colaciones y la mojarra frita o al horno. Disculpen mi ignorancia, pero no las alcanzo a ubicar dentro de los gustos tradicionales de la casi ciudad.
Después de esta Guía con varios errores y pocos aciertos, estos últimos de los que al parecer aun no se percata el IMTCF, aparece un video conmemorativo de los 112 años de la fundación de Cundinamarca en el que se mencionan explícitamente a 30 municipios distinguiéndolos por razones varias. En ninguna de las referencias aparece Girardot con alguno de sus atributos turísticos; lo más cercano es cuando nombran el Río Grande de la Magdalena, ¡pero a ver!
Insisto, y presento disculpas a mis lectores y seguidores por ser incisivo en el tema. Pero es que es ingenuo pensar que con solamente colocar la palabra «Turístico» en letras de molde o nombrarla en cada evento que se inventan, la economía de la casi ciudad va a reverdecer, y su imagen, desgastada por falta de ideas, va a resurgir de entre las escaseces y ausencias que están a la vista, pero todos se empeñan en ignorar.
*Las opiniones plasmadas por los columnistas en ningún momento reflejan o comprometen la línea editorial ni el pensamiento de Plus Publicación.