Girardot cumple más de cinco años sin escombrera municipal

Cuando está a año y medio de vencerse la autorización por cinco años dada por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), al municipio de Girardot para poner en funcionamiento la escombrera,  todo parece indicar que el proceso para que este sitio finalmente se dé al servicio tendrá más demoras. 

Lo anterior teniendo en cuenta que solo hasta el 2021 quedaría lista una parte de las adecuaciones que para el lugar exige la entidad ambiental.

Según lo manifestado ante el Concejo Municipal el pasado sábado (07.11.2020) por el secretario de Infraestructura, Juan Pablo Díaz Vanegas, se está en la consecución de los materiales para la construcción de una garita de vigilancia, una unidad sanitaria con su respectivo pozo séptico, un lavadero de llantas para los vehículos que ingresen y salgan del lugar, y el encerramiento que exige la Corporación para poder habilitar nuevamente la escombrera ubicada en un predio de aproximadamente 1.8 hectáreas, en la vereda Potrerillo, kilómetro 3 sobre la vía Girardot – Nariño.

Al referirse al tema el funcionario informó que dentro del presupuesto para la vigencia 2021 de la Secretaría de Infraestructura se tienen proyectados $100 000 000 para la implementación de estrategias de manejo y aprovechamiento de residuos sólidos y   residuos de construcción y demolición.

Hay que recordar que la autorización para la disposición final de escombros fue otorgada al municipio mediante la Resolución 1296 del 23 de mayo de 2017, previa presentación por parte de la Administración municipal del Plan de Manejo Ambiental para el sitio.

Así como lo divulgó Plus Publicación aproximadamente hace dos años (14.11.2018), además del cerramiento perimetral del predio, que debe ser complementado con la conformación de una barrera viva de árboles y arbustos, la adecuación  exige manejo y control de aguas de escorrentías; manejo y conservación de suelos; manejo de residuos líquidos; manejo de combustibles y lubricantes; manejo de residuos sólidos, y control sobre los efectos e impactos ambientales en la calidad del aire, y señalización.

Además el municipio debe realizar la reforestación requerida a lo largo del cauce existente en la parte baja del área del proyecto,  lo mismo que la ejecución de programas de reforestación con frutales y especies nativas ornamentales como guácimo, samán, matarratón y leucaena  para el manejo y la conservación de suelos en las áreas que no serán intervenidas por las actividades del proyecto.

Las obras y trabajos deben incluir la construcción de obras de drenaje definitivas, una cubierta vegetal protectora a manera de barrera viva que permita el aislamiento de las ondas sonoras (minimizando de esta manera los impactos ambientales que la emisión de material particulado genere en la atmósfera), entre otras exigencias del Plan de Manejo Ambiental que deben ser ejecutadas para poner en funcionamiento el sitio.

No hay que olvidar que la historia por la que a hoy lunes, 9 de noviembre de 2020 Girardot aún no cuenta con un sitio para la disposición de desechos de construcción, se remonta al 9 de abril de 2015: fecha en la que la CAR, mediante Resolución DRAM0015 impuso al municipio de Girardot medida preventiva que consistía en la suspensión inmediata «de las actividades de disposición final de escombros y otros materiales, en el predio denominado California […]».  Desde  esa fecha  al día de hoy han  transcurrido exactamente 5 años y  7 meses.   

Sobre el tema Plus Publicación contactó al director de la Regional Alto Magdalena de la CAR Cundinamarca, Manuel Reinaldo Díaz González, quien precisó que una vez el municipio ponga en funcionamiento la escombrera debe elevar a la CAR la solicitud de ampliación del permiso otorgado en mayo de 2017, con el fin entrar a considerar y analizar jurídicamente la viabilidad de extender dicha autorización.   

Refiriéndose a la importancia de abrir la escombrera preciso, que es «muy necesario teniendo en cuenta que el desarrollo urbano de Girardot viene haciéndose sin tener ese establecimiento».

«Podemos ver en diferentes puntos o lotes baldíos de la municipalidad cómo los utilizan indebidamente para disponer estos residuos, y esto no es lo correcto», señaló agregando que existen afectaciones muy grandes en sectores de la ciudad como Portachuelo, Pozo Azul, Esperanza Norte, Solaris y Barzalosa por esta problemática.