Salud
Es importante vacunarse contra la influenza estacional. Principalmente los mayores de 60 años
Según la subdirectora de enfermedades transmisibles el incremento de morbimortalidad en la población con patologías crónicas y adultos mayores de 60 años ocasionado por el COVID-19 obliga, adicional a la vacuna, fortalecer las medidas de auto cuidado y tener en cuenta las recomendaciones en materia higiénico – sanitaria impartidas por el Ministerio.

Se calcula que cada año un 10% de la población mundial adquiere la influenza estacional, lo que evidencia la importancia que reviste que las personas más susceptibles y de mayor riesgo de contraer la infección se apliquen la vacuna contra la misma.
Esa importancia es mucho más marcada si se tiene en cuenta que el virus causa una alta incidencia de mortalidad en mayores de 60 años de edad señaló Claudia Cuéllar, subdirectora de enfermedades transmisibles del Ministerio de Salud y Protección Social, al explicar que la razón de la vacuna anual se debe a que el virus tiene la propiedad de cambiar constantemente.
Agregó que la vacuna que se utiliza en el país por recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) genera una protección entre el 70% y el 80%.
Para distribuirlas en las 37 entidades territoriales de la geografía nacional y atender a su población, el país adquirió en abril 2 100 000 dosis pediátricas, 3 100 000 para adultos y 342 000 para personal de la salud.
La meta para al 31 de diciembre del 2020 es vacunar cerca de 387 000 menores de un año, 361 000 de un año de edad, y 387 000 mujeres gestantes a partir de la semana 14.
A ese objetivo se suma la vacunación de 834 000 personas con diagnósticos de riesgo (hipertensión, diabetes, obesidad, asma, enfermedad renal, entre otras), 342 000 trabajadores de la salud y 2 000 000 de adultos a partir de los 60 años.
Otros grupos que el Ministerio resolvió incluir desde el pasado mes de septiembre son: menores de 3 a 5 años, población general a partir de los 50 años de edad y personas que convivan con adultos mayores de 60 años o que convivan con pacientes con patologías crónicas.
Según la subdirectora de enfermedades transmisibles el incremento de morbimortalidad en la población con patologías crónicas y adultos mayores de 60 años ocasionado por el COVID-19 obliga, adicional a la vacuna, fortalecer las medidas de auto cuidado y tener en cuenta las recomendaciones en materia higiénico – sanitaria impartidas por el Ministerio.
«Se debe sumar la vacunación contra la influenza estacional como una medida para proteger a la población de mayor riesgo de tener complicaciones causadas por los virus circulantes de influenza y facilitar la identificación y diagnóstico de una posible infección por la covid-19», precisó la funcionaria al agregar que la vacuna no tiene ningún costo, y su aplicación debe hacerse en cerca de 3000 puntos públicos y privados disponibles en el país.
Los síntomas de la influenza estacional, cuya duración es de aproximadamente una semana son: fiebre alta, dolores musculares, dolor de cabeza, malestar general, tos seca, dolor de garganta y rinitis, por lo que puede confundirse con una infección por el COVID-19, indicó el Ministerio de Salud, al precisar que aquella «afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones».
Debe tenerse especial cuidado con los la población infantil, los mayores de edad y las personas que padecen otras afecciones médicas graves, ya que la infección (influenza estacional) puede ocasionar graves complicaciones como la neumonía, y en algunos casos la muerte indica la información entregada por el Ministerio insistiendo en la importancia de que todos los adultos mayores se apliquen la vacuna.
Foto Pixabay.