Ciudad
Política Pública y caracterización de la comunidad LGBTIQ, prioridades para Wilson Collazos Álvarez, coordinador del programa
La ultima caracterización de la que tiene cuenta el coordinador de LGBTI en Girardot es de 2013, adelantada por la Oficina de Planeación. « Para la Secretaria de Planeación de esa época había solo 118 personas que pertenecían a la comunidad. Ni siquiera son 118, creo que son 83».

La comunidad LGTBIQ en Girardot es una de las que menos atención ha recibido por parte de gobiernos anteriores frente a sus necesidades y vulnerabilidad. Si no se ha formulado una caracterización que reconozca su identidad, actitudes y preferencias, menos existe una Política Pública que desde el gobierno municipal contribuya a su protección, defensa de sus derechos humanos y desarrollo personal.
Wilson Alexander Collazos Álvarez, administrador de empresas de la Universidad Piloto de Colombia, desde hace dos meses lidera la coordinación de LGBTIQ, respaldado con la confianza que tiene en el alcalde Francisco Lozano Sierra, y la gestión que pueda adelantar desde lo local y el gobierno departamental.
UNA COORDINACIÓN HÚERFANA
Posiblemente la manera como se recibió la Coordinación LGBTIQ en febrero de este año explique lo que ha venido sucediendo con este sector en los últimos años: « Yo recibí una Coordinación muy huérfana […] desde tiempo atrás venía muy huérfana […] no había nada. Esto era una bodega de cosas viejas, sin pintar, sin decorar, no tenía identidad. […] Y no solamente en esta Administración del año pasado, porque fue muy difícil; el año pasado no hubo coordinador, este programa no tuvo un líder. […] antes LGBTIQ y afros era manejado por la misma persona».
RELACIÓN ALCALDÍA Y COMUNIDAD LGBTI
Lo primero que Wilson Alexander destaca es la cercanía que la Alcaldía municipal ha tenido con un sector importante de la comunidad LGBTIQ: « En la Alcaldía realmente hay mucho funcionario de la comunidad LGBTIQ. Unos que de pronto no se han salido del clóset o que no lo reconocen, otros que como yo sí lo reconocemos públicamente que pertenecemos a la comunidad». En este punto se refiere también a Michelle, su apoyo en la coordinación, y que como «chica trans», como el la nombra, « […] a las que nunca en la Alcaldía se les había dado una oportunidad laboral».
Resulta revelador escucharle decir que «en la Alcaldía en este momento se están dando cuenta que la comunidad LGBTIQ no es una minoría. Somos una comunidad con un enfoque diferencial y diversa, ¡pero somos una mayoría!».
ESTILISTAS Y MICROTRÁFICO
En el diagnóstico de los puntos más críticos en el sector, el coordinador de LGBTIQ señala puntualmente dos: uno de los sectores económicos más afectados por la llegada de venezolanos a Girardot han sido los estilistas. Los clientes de estos sitios han preferido últimamente frecuentar las barberías, que han crecido significativamente en la ciudad.
Como segundo factor menciona el microtráfico: « Para nadie es un secreto que está afectando muchísimo tanto a heteros como a la comunidad LGBTIQ. Entonces ahorita cada vez aparecen nuevas drogas, como el popper, […] que consumen a diestra y siniestra en las fiestas y lo venden en cualquier parte».
Aunque es cierto que el microtráfico y por ende la drogadicción amenaza a todos los sectores de la comunidad, para Wilson Alexander en este caso puntual cobra vigencia, ya que « […] hay mucho chico homosexual que busca la calle por la falta de apoyo que tiene en su entorno familiar. Entonces estos chicos cuando llegan a ciertos grupos, […] con sus amigos, […] no falta ese ejemplo que ellos ven, y para ser parte de esos grupos terminan también consumiendo. Cuando hay un apoyo desde el entorno, desde el interior de la familia créame que es muy difícil que los chicos caigan en esta clase de problemas.
En cuanto al tema de las barberías espera que ocurra una reunión que tiene prevista con el alcalde Lozano, junto a los «principales líderes » y consejo consultivo LGBTIQ de Girardot, « […] para mirar precisamente cuáles son sus principales necesidades, cómo los vamos a empezar a ayudar y a apoyar. Es un compromiso que tiene él y lo adquirió conmigo en una reunión que tuvimos el día viernes 26 en el despacho».
Por supuesto no desaprovechó la oportunidad para señalar que un número importante de la comunidad no se preocupa por su futuro: « […] no se preocupan por su parte de salud, cotizando como debe ser, su pensión, hay un desconocimiento de esa parte legal que se debe tener para que ellos puedan a futuro tener un colchón de donde poderse coger en los tiempos duros, como los que estamos viviendo hoy en día. Entonces hay que capacitar más a la gente para estas cosas».
CARACTERIZACIÓN
La ultima caracterización de la que tiene cuenta el coordinador de LGBTIQ en Girardot es de 2013, adelantada por la Oficina de Planeación. « Para la Secretaria de Planeación de esa época había solo 118 personas que pertenecían a la comunidad. Ni siquiera son 118, creo que son 83».
Posteriormente, dice él, existe otro trabajo adelantado por la profesora de la UDEC, Carlota Castro, que arrojó el resultado de 716 personas encuestadas, pertenecientes a estratos 1,2 y 3, al tiempo que subraya que en Girardot actualmente debe haber un registro de 1500 personas pertenecientes a la población LGBTI, por lo que convierte a la realización de una nueva caracterización en una tarea principal para este 2021.
POLÍTICA PÚBLICA LGBTIQ
Otro vacío que afecta a la comunidad LGBTIQ es la ausencia de una Política Pública. Wilson Alexander participó en la que se intentó realizar durante el final del gobierno del alcalde César Fabián Villalba, la que parece « desafortunadamente no sé qué problemas legales hubo […] nunca se entregó porque la Administración, tengo entendido, no le pagaron al ente que contrataron» recuerda.
Una Política Pública no se saca adelante en poco tiempo y con escasos recursos comenta Collazos Álvarez: « para hacer una Política Pública se requiere más tiempo y unos recursos bien suficientes […] y que no sea copiada de otra ciudad, porque todas las ciudades tenemos diferentes necesidades. En Girardot tenemos una necesidad muy diferente a la que tiene Cali, a lo que tiene Bogotá, no podemos hacer una copia de una Política Pública de otra ciudad».
CULTURA
Por supuesto que al hablar de LGBTIQ es necesario, como en cualquier otro espacio, hablar de cultura.
La Coordinación de LGBTIQ en Girardot viene adelantando propuestas interesantes como danza y teatro. Al respecto su coordinador afirmó que « Tenemos el proyecto con una academia de baile que se llama Juan Sáenz […] nos está dando su apoyo incondicional para crear el primer grupo de danzas de la coordinación LGBTIQ de Girardot, y teatro (sic)». Pero además, agregó que «Estamos también para conformar el primer grupo de danzas con solo chicas trans en la ciudad».
Lo anterior viene acompañado con la iniciativa también de diseñar y elaborar sus trajes, disfraces, caretas, para « que se haga todo un trabajo artesanal y cultural desde la Coordinación, y hacer presentaciones no solo en Girardot sino en otras ciudades de Colombia».
A la fecha hay inscritas 15 personas, se encuentran en espera de llegar al mínimo número de 20 inscritos para iniciar las clases de teatro y danza de manera gratuita, como lo ha anunciado la Coordinación.
VISIÓN
Para el nuevo coordinador la Visión que se tiene es muy ambiciosa. Consiste en «llegar a una gran mayoría de LGBTIQ que tenga Girardot. Que vengan, que crean, que confíen que acá se está gestionando, que estamos para ayudarlos, para orientarlos, para colaborarles, que estamos es para crecer».
Y todo sujeto a un sueño: « Yo tengo muchos sueños. Y yo sueño apoyando a mi comunidad porque hago parte de ella, sé que si nos unimos, si buscamos la armonía en nuestra comunidad y dejamos tantos conflictos que se han presentado en medio de la misma comunidad, se pueden lograr muchas metas para cumplir».